En Uzbekistán se propone crear un clúster contra la corrupción: un sistema que incluirá estructuras estatales, organizaciones públicas, organismos encargados de hacer cumplir la ley, etc. Según las autoridades, este enfoque elevará la lucha contra los delitos económicos y el soborno a un nivel cualitativamente nuevo. La iniciativa se debatió en una reunión presidida por el presidente del país, Shavkat Mirziyoyev, informó su servicio de prensa.
Se prevé que, en el marco del clúster, se establezca una estrecha interacción entre la Agencia Anticorrupción, los organismos encargados de hacer cumplir la ley, la Cámara de Cuentas, la Inspección Estatal de Control Financiero, las unidades de supervisión interna de los ministerios, instituciones de investigación científica y representantes de organizaciones no gubernamentales sin fines de lucro.
Los participantes del clúster intercambiarán información, realizarán inspecciones conjuntas y análisis de los resultados del monitoreo, lo que permitirá conformar un ecosistema integral y mejorar la eficiencia del trabajo.
En la reunión se prestó especial atención a la digitalización y a la implementación de tecnologías de inteligencia artificial (IA). Así, a partir de la integración de bases de datos de varios ministerios y organismos, se planea poner en marcha un Centro de Análisis de Riesgos para la detección automática de riesgos de corrupción y casos de afiliación en los procedimientos de contratación pública. En el futuro, la actividad de las unidades de cumplimiento se trasladará por completo al formato digital.
Se subrayó la necesidad de fortalecer el control público. En este sentido, se ordenó a los responsables ampliar las capacidades del sistema E-qaror, donde se publican documentos oficiales de libre acceso, e involucrar más activamente a los ciudadanos en el proceso de supervisión del gasto de fondos presupuestarios.
Además, se anunció la iniciativa de crear oficinas de proyectos dedicadas a eliminar los factores que propician la corrupción. Asimismo, los empleados de estas instituciones deberán preparar periódicamente informes sobre el trabajo realizado y proporcionar información al público.
Como parte de la participación de la población en la lucha contra la corrupción, se planea ampliar los grupos de iniciativa para monitorear la ejecución de proyectos de inversión y garantizar la participación de activistas de la mahalla (comunidad) en el control de las obras de construcción. Para estimular las denuncias de delitos, se propuso emitir órdenes de protección a los informantes e introducir un sistema de recompensas para ellos. También se planteó la idea de establecer una insignia “Por la contribución a la lucha contra la corrupción”.
Los funcionarios informaron sobre los resultados de su trabajo. En los últimos años, las unidades de control de cumplimiento de varios ministerios realizaron más de 11 mil inspecciones, se evitó el uso indebido de fondos por un monto de 793 mil millones de sum (66,5 millones de dólares), se detectaron errores y violaciones financieras por 2 billones de sum (167,6 millones de dólares) y se recuperaron 478 mil millones de sum (40 millones de dólares) en daños.
Hasta la fecha, se han aprobado indicadores clave de desempeño (KPI) para las unidades internas de lucha contra la corrupción. Estas han realizado más de 700 actividades de supervisión, identificado infracciones por 354 mil millones de sum (29,6 millones de dólares) y evitado el gasto indebido de casi 550 mil millones de sum (46 millones de dólares). Se han detectado alrededor de 1.400 casos de conflicto de intereses.
Se han iniciado 26 causas penales y 24 procedimientos administrativos contra funcionarios, y otros 148 funcionarios han sido sancionados disciplinariamente.
Se destacó que en los sistemas de salud, educación, catastro, construcción, así como entre los funcionarios públicos, se está consolidando una actitud de intolerancia hacia la corrupción, se garantiza la transparencia en la política de personal y se imparte capacitación en programas especiales anticorrupción.
