El presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyóev, propuso establecer un Fondo Global de Justicia Social que brindará apoyo práctico a diversos países en la lucha contra la pobreza. El jefe de Estado hizo esta declaración en la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social en la capital de Catar, Doha, según informa la oficina de prensa del líder del país.
Mirziyóev señaló que en los últimos años Uzbekistán ha logrado reducir la tasa de pobreza del 35% al 6,6%, y que las reformas en esta dirección continuarán. Sin embargo, ahora es necesario intensificar la cooperación internacional sobre este tema.
«Ha llegado el momento de crear una nueva arquitectura financiera para combatir la pobreza, que atraerá recursos hacia los programas sociales de los países en desarrollo», argumentó el presidente su iniciativa.
El jefe de Estado enfatizó la importancia de implementar mecanismos modernos para resolver eficazmente los problemas de empleo. Hoy en día, el desarrollo de tecnologías avanzadas y la inteligencia artificial está llevando a la pérdida de millones de puestos de trabajo, por lo que adquiere especial relevancia una interacción establecida entre el Estado, las empresas y la sociedad para apoyar a los trabajadores y fortalecer los principios de la asociación social.
El líder de la república expresó su esperanza de que muchos países apoyen la idea de desarrollar una «Iniciativa Global para la Responsabilidad Social y el Trabajo Decente».
Según sus palabras, otra vía para resolver los problemas sociales es ampliar las oportunidades educativas para todos. Después de todo, como afirman los expertos, el daño económico anual debido al analfabetismo asciende a 1,4 billones de dólares. Este factor negativo dificulta que los jóvenes encuentren su lugar en la sociedad y en el mercado laboral. El presidente apoyó las decisiones tomadas en la reunión de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, proponiendo celebrar el próximo foro de este tipo en Uzbekistán.
Mirziyóev prestó especial atención a la protección sistemática de los trabajadores migrantes y sus familias. Declaró que la república está dispuesta a acoger en Taskent un foro sobre este tema junto con la Organización Internacional del Trabajo, así como a aprobar el correspondiente Programa Global.
Tampoco se deben descartar las cuestiones relacionadas con el cambio climático. Las condiciones meteorológicas extremas, la desertificación y la pérdida de biodiversidad afectan negativamente la vida de los agricultores, los trabajadores temporales y los residentes de regiones ambientalmente vulnerables. Por lo tanto, es urgente adoptar medidas integrales para integrar la lucha contra el cambio climático con los programas de empleo. Como dijo el jefe de Estado, Uzbekistán tiene la intención de lanzar un nuevo modelo de desarrollo socioeconómico para la región del Mar de Aral y compartir esta experiencia con la comunidad mundial.
Al concluir su discurso, Mirziyóev confirmó su pleno apoyo a la Declaración Política de Doha adoptada en la cumbre y expresó el compromiso de la república de garantizar la implementación práctica de todos los puntos de este documento.
ℹ️ La capital de Catar, Doha, fue la sede de la segunda Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social. En el evento participaron el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres; el Emir de Catar, Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani; la Presidenta de la Asamblea General de la ONU, Annalena Baerbock; el Presidente del Consejo Económico y Social de la ONU, Loka Bahadur Thapa; así como jefes de Estado y de gobierno, y representantes de organizaciones internacionales y regionales.



